Francisca Castelblanco del Río, nació el 9 de abril de 1982. Un poco antes de que el Palacio Pereira fuera comprado por el Estado chileno el 2011, Francisca logra fotografiar ese mismo año el lugar como parte de un proyecto que compuso las ruinas del edificio con fragmentos desnudos del cuerpo humano. A través de la técnica del collage, la artista explora visualmente el espacio íntimo y los últimos momentos del Palacio en ruinas.
Estudiando fotografía el año 2011, imaginaba como seria armar un collage digital
en base a fragmentos del cuerpo humano. Eran mis primeras aproximaciones al
género del desnudo, donde reflexionaba sobre las características simbólicas que
para mi representaba. El cuerpo me resultaba un espacio íntimo, sagrado, secreto,
limpio y puro. Pero por sobre todo me entregaba la atemporalidad de la imagen,
con posibilidades infinitas de exploración visual. La Figura.
Desde mi adolescencia tuve constantes pesadillas con lugares abandonados,
marginales, destruidos y amenazantes, deslavados. los cuales aparecían
involuntariamente en mi subconsciente. El Fondo.
Ese mismo año surgió la posibilidad de fotografiar el Palacio Pereira, en ese
entonces un esqueleto patrimonial desarmado y en ruinas, a punto de ser
comprado por el estado. Ésto permitió que pudiera obtener los fondos ideales para
mis fragmentadas figuras. Si bien no estuvieron nunca juntos en el mismo espacio,
el collage me abría las posibilidades de poder armar algo aún más conceptual.
Hoy, a diez años de todo lo que fue el palacio y de haber armado esas imágenes,
me doy cuenta que sigo con las mismas ideas con respecto a la representación del
tiempo tanto en la figura como en el fondo. El palacio ya no es lo que era, sin
embargo, quiero creer que persistirá ahí su esencia al igual que yo insistiré en esta
búsqueda fotográfica.